08 diciembre, 2006


Capítulo 53

Cuando leo el post anterior me apeno por mi mismo, pero no por mi suerte sino por el pestilente tono quejumbroso que adopto. Deben corregirme, deben darme duro cuando cometo tales desvíos.

Mi intención no es producir pena y no busco que me consuelen: que les quede claro.

Las cosas que pasan por mi cabeza, y que me permito compartir con ustedes, constituyen una visión, pestilente, eso sí, de mi mundo y quiero limitarme a describirla. Odio el sentimentalismo barato y siento que el post anterior es un craso ejemplo de mi debilidad, la que, claro, siempre me han obligado a ocultar. (Y para reiterarme en el pedido anterior, quiero que cualquier hijo de psicólogo se abstenga de analizarme).

En fin, ahora voy a otras cosas. El otro día Samuel me oyó decir “chucha” y se burló de mí. Chucha, para los que no lo saben, es una de las formas populares para referirse a la vagina y la expresión es, en el sentir de muchas, vulgar. Sin embargo, ha adquirido otro sentido al convertirse en una expresión polisémica: unas veces denota desánimo, otras ira o frustración, pero también puede significar alegría.
Yo la usé luego de darme cuenta de que olvidaba algo cuando salí con él al Supermercado. Y Samuel se burló de mi gran parte del camino porque dije chucha. Luego traté de que me dijera por qué era esa una mala palabra, como él mismo lo dijo, pero no logró explicarse.

Yo, con toda mi sapiencia de padre le dije que no hay palabras malas, sino que a veces son mal utilizadas. Claro que en ese momento tampoco pudo hacer la diferencia pero al final, cuando se cayeron al piso las papas fritas que le había comprado, y luego de decirlo, aceptó que un chucha bien puesto, alivia la frustración.

8 comentarios:

Alguien dijo...

Vaya otro que acepta que la vida es un asco y que al despertar debe decir: "por la grande puta otro mierda dia mas! que asco", bienvenido al club.

Anónimo dijo...

yo tengo con las malas palabras una situación. CUando yo las digo me gustan, pero no sé por qué de ciertas bocas y voces no me gustan. Ese Samuel es un encanto.

Anónimo dijo...

Viviendo en los norteres ingleses a mis hijas les toca hablar ingles fuera de la casa y escuchar espanol el resto del tiempo. A estas alturas dicen clarito CHUCHA y saben que no es lo mismo que chuuuuuuuuuuuuuucha o chugggggggcha! ABAJO LA IGLESIA VIVA LA REPUBLICA

Guido Moreno dijo...

En verdad una palabra bien puesta alivia el stress y como dice el anónimo anterior hay muchas variantes que sirven para cada ocasión.
No es lo mismo chucha!!! que chugcha...o por la chuccha!!!...En fin, para el caso de las papas fritas fue muy bien utilizado el ejemplo didáctico de El Apestado.

Anónimo dijo...

Respecto a la sugerencia de usar verga...yo se que es politicamente correcto PERO no siempre es util. Por ejemplo: si me tiro al vecino puedo decir que chugchas...si hubiera ganado Noboa que verga! Me cachas cd?

Pastv dijo...

chuuuucha...

OZNES dijo...

digamos chucha!! juntos tomados de la mano en la cumbre social de Beijin 5

Carlos dijo...

...pegar una buena puteada o chucheada 100pre será terapéutico y desestresante. Libera endorfinas maestro...no importa la edad que tengas.