No todo apesta, bajo el escaso sol de nuevo año.
Y sí, claro, han sucedido cosas, pero no me atrevo a calificarlas pues los últimos desvaríos de este su Apestoso servidor, han sido objeto de las más severas, de las más estremecedoras verdades, así que me limitaré a relatarlas para evitar así los golpes que puedan derivar de todo esto.
Aunque, claro, debo volver sobre mis afirmaciones, como lo hago a cada momento sobre mis actos, para señalar que solo el sendero que tome lo que me apresto a contar determinará si logro o no evitar los calificativos (esto es lo que llamaríamos, nosotros los doctos inútiles, metadiscurso, ¡puah!)
Las Navidades no fueron tan pestilentes como las esperaba, como las esperaba mi eterno pesimismo. Así, Samuel, mi hijo de cinco años, es el orgulloso poseedor de una flamante bicicleta china que yo mismo logré comprar con el “bono navideño” que me dio Papá Noel.
Además, con el remanente de ese mismo bono, llevé a casa de mis suegros, para la cena de Navidad, una buena botella de Pinot Noir que descubrí hace meses ya en una miserable tienda de barrio, sin que su propietario, claro, sepa de la fineza que tenía en las perchas.
Claro que pudo estar malo el vino, pero ni siquiera eso ocurrió; más bien, la cena de Navidad en casa de mis suegros, fue hasta agradable.
Mi cuñada, su gordinflón marido y sus insoportables críos comieron vorazmente, lo que les impedía hablar mucho, así que me esmeré en tener siempre a su alcance la bandeja más próxima. El vino lo disfrutamos casi solos Macarena y yo pues los demás han entrado en esa inexplicable abstinencia que los lleva a beber gaseosas hasta en la cena de Navidad.
La hermana de Macarena es la que ha puesto el toque diferenciador en estas fiestas, por ejemplo, decidió que irían ellos solos a la playa cosa que me extrañó agradablemente pues se fueron pronto y no se llevaron con ellos a Macarena y Samuel, y aunque sé que unas vacaciones les hubieran sentado bien, me alegré de que no me dejen solo. Y sí, soy un apestoso egoísta que detesta pasarla solo.
Además, y aquí entro ya en lo profundo del post, mi cuñada, demostrando una generosidad extrema, y una independencia que nos ha sorprendido a todos, ha decidido ayudarnos, sin que nadie lo sepa, en nuestro proyecto, aquel que nos sacará de esta apestosa pobreza.
Y claro, ya no me queda más que hacer público el proyecto. Como algunos ya lo saben, vivo en la vieja casa de mi abuela, en uno de los barrios más tradicionales de Quito, en el sector turístico de la ciudad. La casa es grande para nosotros y existe un pequeño departamento en la parte posterior que está deshabitado porque está parcialmente destruido por los efectos del tiempo y el abandono. Ni siquiera Samuel se atreve a entrar ahí, pues le da miedo la oscuridad y le repele el olor a rancio. Así que, en resumidas cuentas, nos pasaremos a vivir ahí, cuando esté habitable, y destinaremos el resto de la casa, de cuatro cuartos más, al hospedaje de extranjeros.
Voilà mi secreto. Ahora hay que ponerse manos a la obra con el primer dinero facilitado por mi cuñada, el mismo que tendremos que devolver en cómodas cuotas, y a medida que el negocio crezca. No les diré cuales son mis expectativas en cuanto al dinero, pero tengo una pequeña idea con lo que yo, o Macarena, pero no los dos, deberemos abandonar nuestros respectivos trabajos para sostener el nuevo.
Y así, la vida de este apestado puede tomar nuevos rumbos. ¡Feliz año a todos!
03 enero, 2008
Capítulo 89 (El Apestado)
Publicado por El Apestado en 7:31 a. m.
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16 comentarios:
Excelente Apestado, me alegra mucho.. (que raro que me alegre si ni siquiera te conozco, pero de verdad te digo, me alegra!).
Es una excelente idea...
Pero solo será para huespedes extranjeros? o podrán llegar también nacionales? Digo por si algún día voy a Quito y necesite hospedaje.
Feliz año nuevo Apestado.
Un nuevo año empieza, y con el muchas esperanzas! planes! y metas que lograr.
Me parece una exelente idea. Nose donde vives exactamente, pero como sabras yo lleve a varios gringos a Quito hace poco, y ellos se quedaron en un "hostal", realmente una casa adecuada en el centro de Quito que les encanto. Era muy sencillo, pero totalmente diferente para ellos.
En fin, deseo que todas tus metas se cumplan, no sera facil y costara trabajo, pero ya estan en el camino, ADELANTE APESTADO!
...lo bueno es que estás empapado del bussines. Yo te recomendaría sigas tu trabajando porque siempre es bueno mantenerse en el medio...tu me entiendes.
Que el 2008 colme tus espectativas brother.
mantanga la calma, que si sale el proyecto, sera un paria propietario, y eso ayuda, al menos un poco.
vaya ahiii!!! suerte en tu proyecto :D (tengo una tia que maneja una agencia de viajes, si es que necesitas huéspedes te puedo hacer el contacto)
En el primer Blog and Beers informal de Ecuas en NY, uno de los puntos fue que los Bienes Raices son una buena inversión en Ecuador especialmente si el sitio donde estas es centrico y turistico. Buena suerte y abrenos las puertas a los apestonos nacionales que tambien visitamos Ecuador.
qué bacán!
feliz año, suerte con el proyecto. un saludo.
Mucha suerte.
Regresé:
www.chismes-culturales.blogspot.com
Pues aquí vengo a los tiempos, estimado señor pestilente. Y ya se habrá dado cuenta que no todo el tiempo la vida nos va a pedorrear en la cara.
Así que soplan nuevos vientos que se llevarán para otro lado estos malos olores.
Un gran saludo.
Por fin sé el plan que tienes para salir del hueco. Por la blogsfera hay profesionales de todas las ramas así que de seguro vas a tener quien te ayude. Buen proyecto el que se te viene. Adelante entonces...
Tambien me senti feliz con el proyecto.. Felicitaciones Apestado... no todo apesta en esta vida, feliz año !
Que chevere!!!...coincido con belica...por si acaso llegue a caer por Quito..que tengo pasaje comprao desde hace rato...
un feliz año tambien "el apestado"... porque el nombre ? puedes contarme un poquito
Ustedes los que comentan no se dan cuenta que la faceta de nuestro apestado anti-heroe pude terminar si derepente es exitoso en los negocios? un poco de cordura, por favor.
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